Fundación Dispurse ganó el premio ConectaRSE para Crecer 2019 en la categoría Educación

Nos sentimos muy orgullosos de anunciar que somos ganadores del concurso “ConectaRSE para Crecer 2019”, un importante reconocimiento organizado desde 2011 por la compañía Telefónica del Perú.

El premio en mención lo recibimos en la categoría “Educación”, gracias a nuestro programa de Alfabetización con el uso del aplicativo Focus, que enseña a jóvenes y adultos, a leer, escribir y contar a través del auto aprendizaje.

ConectaRSE para Crecer es un reconocimiento anual que busca identificar, reconocer y potenciar aquellas iniciativas que, a través del uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), impactan positivamente en el desarrollo social y económico de comunidades rurales en el Perú.

Este importante reconocimiento nos impulsa a seguir trabajando para lograr nuestro propósito: Contribuir a erradicar la pobreza a través de la educación.

Reescribiendo Historias: El poder transformador de la educación para jóvenes y adultos

El evento organizado por Es Hoy, DVV International y la Fundación Dispurse destacó el esfuerzo conjunto de empresas, municipalidades, instituciones educativas y la sociedad civil para cerrar las brechas educativas en jóvenes y adultos. En un contexto en el que 1 de cada 3 personas en el Perú no ha finalizado su educación básica, este encuentro subrayó la importancia de la educación como herramienta de transformación.

Fundación Dispurse participa en pasacalle de sensibilización por el Día Internacional de la Alfabetización en Cajamarca

En conmemoración al Día Internacional de la Alfabetización, la Fundación Dispurse se unió al Pasacalle de sensibilización realizado en la ciudad de Cajamarca. Este evento reunió a estudiantes, docentes, organizaciones y autoridades locales para destacar la importancia de la alfabetización en el desarrollo personal y comunitario.

En el Día Internacional de la Alfabetización, compartimos la inspiradora historia de María

María Quispe Ito es una artesana de 51 años, teje gorros, guantes y escarpines con lana de oveja y los vende en la Plaza de Armas de su distrito Coata, en la región Puno. Siendo niña fue forzada a trabajar, por lo que se alejó de sus padres siendo muy pequeña, quienes estuvieron a su cuidado no se preocuparon porque fuera al colegio.